sábado, 28 de agosto de 2021

Papas y Ciencia

Sé que hace mucho, quizá demasiado, que no escribo ninguna entrada. Estoy ocupado con otros menesteres y dejo el blog para el final. Y el final es el final, con lo que no llega apenas nunca.

Hoy quiero hacer una breve entrada escrita a vuelapluma, y pido perdón de paso por no poner las citas de las fuentes, cosa que por otra parte no considero esencial por la poca dificultad que encontrará para ello quien las precise.

Recuerdo que, en mis años de estudiante teólogo, tuve que tragarme muchas críticas de otros sacerdotes teólogos que defendían como una metedura del Papa Pío XII el hecho de que en la preciosa y actual Humani Generis definiera (en sentido lato) el monogenismo. Esos críticos alzaban la voz haciendo paralelo con lo mismo que defendían hablando de la Sagrada Escritura, esto es, que la Biblia y el Magisterio no enseñanban verdades científicas, sino salvíficas. Evidentemente aquí hay mucha tela que cortar y la cosa no se puede despachar en una frase tan eslogan. Por tanto, el Papa no debía decir si el género humano desciende de una única pareja varón-mujer, de varias en varios sitios del mundo, de si el pecado original se transmite por generación o por pertenencia a la especie humana, etc. Y así se abría la puerta al poligenismo y a los errores bíblicos o magisteriales en cuestiones científicas, que, según ellos, no caen en su jurisdicción. Vamos a dejarlo aquí, no sin señalar que tal postura -contraria al ejercicio magisterial del Papa- es impía y errónea, al menos simpliciter dicta.

Pero hete aquí que me encuentro el otro día hablando contra los defensores de la causalidad humana del cambio climático, contra la ecologismolatría, y otros asuntos de similar tenor. Y tras escucharme uno de aquellos amigos míos defensores de las tesis anti Humani Generis, me espeta que lo ha dicho el Papa en Fratelli tutti y Laudato sì. No quise contestarle en público porque estaban presentes también algunas almas cándidas que no tienen necesidad de escuchar a dos sacerdotes discutiendo sobre opiniones papales. Lo hice en privado, pero como suele ocurrir, la soberbia teológica es mucha soberbia, también la que yo pueda tener. Y otra vez aquí lo dejo.

Resumiendo, muy distinto es que una verdad de fe influya en o determine una verdad empírico-científica, como ocurre en el caso de la creación ex nihilo, de la animación directa por parte de Dios de la persona humana, del hecho hereditario del pecado original y el monogenismo, o de la realidad de los milagros, por poner algunos ejemplos, y otra cosa es que se pretenda obligar, bajo supuesta autoridad pontificia, a creer o mantener como quasi de fide aut moribus afirmaciones discutidísimas y opiniones sobre hechos también quasi científicos.

Me viene a la memoria una anécdota que no tiene mucho que ver con lo anterior, pero sirve para explicar lo católicos que somos cuando nos da la gana. Un buen amigo tomó posesión de su parroquia, un pueblo casi urbanita con una iglesia hermosísima y grande como una basílica. El caso es que me invitó a la fiesta del Santo Patrón. En la Santa Misa, estando el templo abarrotado, llegado el momento de la consagracion, y percatándose -como ya había ido haciendo- de que muchos -demasiados- permanecían de pie, dijo tras la epíclesis: "Por favor, los católicos pónganse de rodillas", cosa que dubitativamente hicieron no más de cuarto de docena de feligreses. Llegada la sagrada Comunión, vio que prácticamente todo los presentes se acercaron a recibir el Santísimo. Entrados a la sacristía, me dijo con tanta pena como sorna: "¿Te has fijado qué pocos católicos tengo en la consagración, y cuántos en la Comunión?". Pues eso.

Moraleja: sea siempre católico, cuanto más, mejor. Y si la ciencia va contra la fe (y valga también contra el sentido común y la razón natural), quédese impepinablemente con la fe, que ni el Papa es científico, ni la verdad es contradictoria.

jueves, 2 de marzo de 2017

Personas v/s sentimientos

Cuando la "emotividad" y los "sentimientos religiosos" son el criterio para medir el valor de una Misa o una blasfemia, es claro que no se tiene en cuenta que aquí no se ofenden sentimientos sino personas: Jesucristo, la Virgen, los cristianos... Si ofenden un sentimiento, pueden estar tranquilos, que los que ofenden sentirán lo suyos y los ofendidos ya sentirán otra cosa... Si una Misa es buena porque es emotiva, ya me *emotivará* una película, y además me divertiré... Estamos viviendo en Matrix...

domingo, 6 de noviembre de 2016

"Como un suspiro..." A mi mamá en este aniversario

No he sentido ni moverse las hojas del calendario,
pero he sentido en mi vida, como un dolor cotidiano,
tu rara ausencia, tu fiel presencia, tu luz intensa,
y el tiempo que pasa al tiempo que una centella, un leve rayo…
Si los días que me quedan toman de estos su modelo
creo que antes de una hora te estaré viendo de nuevo…
Un año ya, y sin embargo, no echo de menos tus besos…
Los siento cuando despierto, y también cuando me duermo…
Los siento a todas horas, porque a ti también te siento,
tu dulzura, tu belleza, tu sonrisa, toda tú,
mi amada madre, y el consuelo
de que te sé bien contenta, y te llenaré de besos,
porque es un breve suspiro
lo que me aparta del cielo…

martes, 23 de febrero de 2016

"Como siempre", a mi mamá

No son golpes lo que sale de mi pecho,
que son gritos de un varón enamorado
de su madre,
de la dama que, olvidada, se ha entregado
por su amado, sin cuidar de cuánto ha hecho
sin pagarle...
No hubo día con su noche que durmiera
sin hacer que de su beso el viento fuera
mensajero,
y la luna con sus rayos me acunaba,
y dormido entre sus brazos me quedaba
tan sereno...

domingo, 18 de octubre de 2015

Qué difícil

Qué difícil es no verte,
y qué duro no besarte,
qué dolor no acariciarte,
y qué triste no tenerte…
Qué dulzura contemplarte,
qué gozo mil besos darte,
qué suavidad el tocarte
y entre tus brazos mecerme…
¡Ay, cómo amarte quisiera,
que estoy de tu amor celoso!
Pues no hay nombre más hermoso
ni existe mujer más bella
que el de madre y quien lo lleva.

miércoles, 14 de octubre de 2015

No puedo, madre...

No puedo irme a dormir si en ti no pienso,
no puedo,
que el corazón me late fuerte
y quiero
cerca de mí tenerte…
No puedo ni un segundo estar sin verte,
no puedo,
que de tal modo tu rostro me encandila
que quiero
dejar grabada tu belleza en mis pupilas…
No puedo respirar sin tus aromas,
no puedo,
que rosas y jazmines y mil flores
sólo bromas
parecen comparado a tus olores…
Y quiero que me beses y no dejes,
te lo ruego,
de darme la dulzura de tus besos,
que muero sin consuelo si me faltas
porque te quiero, madre,
¡Cómo te quiero!

lunes, 12 de octubre de 2015

El viento, mensajero de mamá

Esta noche pido al viento
que te lleve mis caricias,
y sobre tu bello rostro
deslice con gran dulzura
mis arrullos y mis besos…
Y me traiga de tu parte
los que tanto echo de menos…
Porque no puedo vivir
si de los tuyos carezco…

El canario y la rosa

El perfume del rosal
anda buscando su olor,
porque dicen que han sentido
un aroma perfumado
que hace envidiar a su flor.
Y un canario sin descanso
vuela buscando un sonido,
porque dicen que han oído
una melodiosa voz
que le hace sombra a su trino…
Cogió el canario en el pico
la rosa que te envidiaba
y arribando a tu ventana
sólo pudieron decir:
“De aquí no podemos ir,
que no hay en el mundo rosa
como esta mujer hermosa,
ni canción más melodiosa,
que su voz poder sentir”.

domingo, 11 de octubre de 2015

Estrella humilde

Una estrella se ha caído
hasta el barro de esta tierra;
y en silencio se ha escondido
en una casita humilde.
Mas por más que ella lo intente
no puede oculta quedarse,
porque su luz todo llena.
¡Ay madre, que quiero verte,
y en tu luz ensimismarme,
y a tu calor arrimarme,
y consolarte en tu pena…!

viernes, 9 de octubre de 2015

Mujer bella, mi madre

Una rosa, una estrella,
un torrente de belleza,
un amor que me deshace
cada vez que pienso en ella…
Puro fuego que me enciende,
fuente pura que refresca
porque mana besos puros
que se llevan mi tristeza…
Un cantar que me enamora,
un mirar que me consuela,
un beso que no se acaba…
así es mi mujer bella…